Durante una reunión familiar después del almuerzo como de costumbre los viernes, donde mis hermanos, sus esposas e hijos solían reunirse en la casa de mis padres, llamó mi atención el niño Hamza de ocho años y cómo interactuaba con sus compañeros de familia. El niño les señalaba cosas y les sugería nuevos juegos y formas de jugar, y ellos lo seguían con entusiasmo y siempre lo involucraban en las conversaciones. Su presencia era dominante e influyente, lo que me hizo preguntarme: ¿es el liderazgo algo innato o una habilidad adquirida? ¿Es posible criar a nuestros hijos para que se conviertan en líderes en el futuro
Descubramos juntos qué es el liderazgo y quién es un líder.¿Cómo podemos criar a nuestros hijos para que se conviertan en grandes líderes
Qué es el liderazgo?
Existen múltiples definiciones del liderazgo que a menudo se entrelazan con los conceptos de gestión. Por supuesto, la relación entre ambos es muy estrecha, pero el liderazgo difiere en su esencia y contenido de la gestión en general, y esta última puede ser una parte importante de lo que la precede.
Pero su presencia no es necesariamente una condición para que un gerente se convierta en líder
Entre esas definiciones que podrían acercarte al concepto de liderazgo, lo que dijo James C. Hunter es uno de ellas: “el liderazgo es la habilidad de influir en personas para que trabajen con entusiasmo hacia una meta común, inspirándolas y dando un buen ejemplo”
La habilidad de influir en las personas para trabajar con entusiasmo hacia una meta común, logrando objetivos que benefician el bien común, a través de una fuerte personalidad ética merecedora de confianza
También la definición de John C. Maxwell: “el liderazgo es influencia, nada más y nada menos”
Quizás haya notado conmigo que el liderazgo en las dos definiciones anteriores gira en torno a la influencia. Cuanto más fuerte sea la personalidad de su hijo y su capacidad para influir en quienes lo rodean, sin duda ocupará el lugar adecuado en la escala de liderazgo
Pero es suficiente la influencia por sí sola para hacer de la personalidad de su hijo un líder
Por supuesto que no, hay algunas cualidades que un líder exitoso debe tener, y conocerlas también es importante y necesario
Busque estas cualidades en la personalidad de su hijo, y luego habrá identificado un buen lugar para él, tomando así el control y comenzando su viaje para convertirlo en un pequeño líder
Quién es un líder
Un líder es la persona a la que puedes seguir a un lugar al que no te atreverías a ir solo
Un líder posee características y rasgos psicológicos específicos que lo califican para ver el potencial y las habilidades de su equipo o seguidores, y explotarlos de manera óptima. Lo verás trabajando para guiar a cada individuo a hacer lo que le conviene y se adapte perfectamente a sus habilidades, logrando así los objetivos del equipo y sus intereses generales
La importancia del liderazgo para tu hijo/a
Su importancia no reside solamente en liderar a los demás, ya sea a nivel de compañeros y amigos, compañeros de clase o incluso en el equipo de trabajo cuando crece y ocupa un puesto importante.ShareLikeDislike
Pero la importancia del liderazgo se hace evidente en gran medida porque aligera la personalidad del individuo, haciéndola más equilibrada y estable para enfrentar los desafíos y presiones de la vida, y permitiéndole tomar el control y conocer sus fortalezas y debilidades, así como sus posibilidades y limitaciones
Le hace ser consciente de sus virtudes y defectos, éxitos y fracasos. Se podría decir que el liderazgo lo convierte en el capitán de su propio barco en esta vida
Métodos de enseñanza del liderazgo
Si no puedes liderarte a ti mismo, no intentes liderar a los demás. – William Penn
¿Cuáles son los métodos que puede seguir para criar a su hijo, para inculcar en él las cualidades de liderazgo y criar un gran líder
1- Dale amor sincero
Siempre demuestre a su hijo un amor sincero y leal que provenga directamente de su corazón para satisfacer sus necesidades emocionales constantes. Al satisfacer esas necesidades, lo ayudará a amarse a sí mismo y a tener una actitud emocionalmente equilibrada, además de que esta emoción y amor se reflejarán en aquellos que lo siguen.
2- Permítale asumir la responsabilidad
Acostumbre a su hijo a asumir la responsabilidad de sus acciones y palabras, que son el resultado de sus elecciones personales. No intente encontrar excusas y justificaciones para sus errores, y permítele aprender de ellos
Refuerce su responsabilidad en las pequeñas tareas que realiza: limpiar su cama, cuidar su habitación y lavar los platos después de comer. Todas son pequeñas cosas que puede hacer y asumir toda la responsabilidad por ellas. Sin duda, esto aumentará su responsabilidad en gran medida
3- Enséñale a encontrar soluciones en lugar de quejarse.
Liderazgo significa tener la capacidad de resolver problemas, tomar decisiones y tener reflejos rápidos
Cuando su hijo le presenta sus pequeños problemas, anímelo a pensar en soluciones juntos en lugar de darle una solución directamente sin esfuerzo o pensamiento. Después de presentar diferentes soluciones, ayúdelo a tomar la decisión adecuada que pueda resolver su problema de una manera satisfactoria y haga que se sienta seguro de sí mismo y capaz de liderar su vida
4- Haz que le guste aprender
Infunde en él el amor por el aprendizaje y el conocimiento, permítele hacer todas sus preguntas, y ayúdalo a encontrar las respuestas por sí mismo. Extiende tus alas para que se sienta seguro mientras descubre este vasto mundo que lo rodea.
No dependas de la tradición para enseñarle sin comprensión, más bien concéntrese en explicarle con razón y lógica, y explícale que hay un Creador del universo que lo creó todo en proporción a su edad, comprensión y entendimiento
5- Comparte con él su éxito
Cuando logre algún éxito, aunque sea en algo pequeño, anímelo a celebrar y dale la confianza de que se lo merece, y que la victoria es su aliada debido a su esfuerzo, perseverancia y confianza en Dios. Anímalo a compartir los éxitos de sus compañeros y amigos, y ayúdalo a tener un papel destacado en tales ocasiones, para que se alegre por ellos de la misma manera en que se alegra por sus propios logros y éxitos
6- Anímalo a ser proactivo
Hay muchas situaciones que pueden ocurrir dentro o fuera de casa que requieren que alguien tome la iniciativa y resuelva la crisis o el problema urgente que ha surgido: un vidrio roto en medio de la calle que necesita ser levantado y apartado, una anciana que quiere cruzar la calle y busca una mano que la ayude. Al responder rápidamente y ofrecer ayuda a estas situaciones, estarás inculcando en tu hijo dos cualidades importantes para formar líderes: ser un modelo a seguir y tomar la iniciativa. Tu hijo verá con sus propios ojos cómo ser un modelo a seguir y aprenderá un modelo práctico para tomar la iniciativa. De esta manera, se convertirá en la persona en la que otros confían para comenzar a tomar medidas
7- Anímalo a reconocer sus errores
El error no es una vergüenza, pero la verdadera falla es nuestra arrogancia y nuestra insistencia en nuestros errores. Un líder valiente no se avergüenza de admitir sus errores y pedir disculpas, y retroceder ante todos
8- No apagues su risa
Los niños son naturalmente divertidos y les encanta reír y jugar. No apagues su espíritu alegre con frases como “sé un hombre” o “¿por qué te ríes, perdedor?” o “te ríes como si hubieras perdido el sentido común”. Estas frases pueden ser destructivas para la autoconfianza de nuestros hijos y pueden llevarlos a la desesperación. En cambio, deja que traiga un ambiente de alegría y diversión siempre que no cruce los límites del buen gusto y la etiqueta pública
9- No lo alimentes con una cuchara de oro
No facilites todo para él/ella, deja que experimente diferentes desafíos y obstáculos que sean apropiados para su edad y que sepas que puede superarlos, basándote en tu conocimiento de sus habilidades y capacidades. Si lo permites, él/ella intentará por sí mismo y tropezará y se levantará varias veces, pero bajo tu supervisión para que puedas intervenir en el momento adecuado, para evitar que se sienta fracasado y frustrado, y para evitar que su autoestima sufra
10- Dale una confianza absoluta
Una de las características más distintivas de los líderes es su gran reserva de confianza en sí mismos, lo que les ayuda a superar muchas dificultades y desafíos. Esta confianza les otorga una fuerza que les permite enfrentarse a todo el mundo sin importar las malas intenciones de los envidiosos, el rencor de los resentidos o la burla de los sarcásticos.
Eres tú quien construye este fuerte edificio de confianza en su interior desde una edad temprana. Acostúmbralo a trabajar duro y esforzarse, y haz que sus pequeñas acciones tengan un gran impacto en su autoestima. Además, debes evitar culparlo, reprenderlo o criticarlo de manera destructiva y repetitiva.
11- Siembra en él/ella el espíritu de perseverancia.
Asigna a tu hijo/a algunas tareas que requieran un tiempo prolongado, como colorear mandalas (un dibujo complejo dentro de un círculo con patrones repetidos y muchos espacios en blanco, y el ejercicio consiste en colorear esos espacios con los colores que desees), o la práctica del origami (que es el arte de doblar y plegar papel para obtener formas específicas), cualquier actividad en la que tenga que pasar mucho tiempo para completarla. Anímalo/a a terminar lo que empieza y a seguir adelante hasta el final
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Los líderes pueden expresarse bien y no deben ser reprimidos en sus opiniones o en su derecho a expresarse y responder de cualquier manera en todas las cuestiones. No importa lo que suceda, debes permitirle que hable y se exprese, y debes darte el derecho de escuchar y mantener el silencio, y luego proporcionar orientación.
Esto lo preparará para ser un líder comunicativo y capaz de presentar sus ideas con fluidez, expresarse claramente sobre cualquier tema y expresar su opinión sobre lo que está sucediendo a su alrededor
13- Fomenta en él/ella el espíritu de dar
Los líderes por naturaleza son personas generosas y saben cómo servir a los demás. Trabajan para guiar a las personas hacia el camino correcto y los animan a hacerlo de manera constante. Apoyan moralmente a quienes los rodean antes de brindarles apoyo material. Por lo tanto, debes inculcar en él/ella este espíritu a través de convertirte en un modelo y un ejemplo que vea con sus propios ojos y se llene el corazón de ello